Hoy 4 noviembre se cumplen 97 de la Muerte de Tomás Meabe, escritor, director de “La lucha”, detenido y procesado 15 por sus artículos, sufrió el exilio en más de una ocasión, y sobre todo fundador de las Juventudes Socialistas, motivo principal de su recuerdo, para lo cual se tuvo que enfrentar a gran parte del PSOE, incluido Pablo iglesias, que defendían la disciplina del partido y no veían con buenos ojos la constitución de las Juventudes Socialistas, una organización con capacidad para decidir por si misma  dentro del seno del PSOE, pero que pese a todo ha resultado ser su mejor garantía de futuro, y su principal corrector; firme defensora de los principios socialistas y de carácter revolucionario a lo largo de la historia.

Son muchas veces a lo largo de nuestra historia que hemos querido ir más allá de lo que iba el partido, por el carácter de lucha y de búsqueda de la revolución, contra el capital y las injusticias que aspiraba a suprimir la organización. Hoy en este tiempo de crisis se hace más que necesario recuperar este espíritu de lucha y de revolución ante unas injusticias que van a más día a día amparadas por el capitalismo más salvaje que podamos contemplar y aunque algunos nos digan que paremos, que con calma, por lo que somos debemos seguir adelante y luchar.

Decía Tomás Meabe, como cita el carnet de los militantes de las Juventudes Socialistas, que “Los jóvenes son los continuadores de todos lo grandes trabajos realizados, de todos los esfuerzos realizados en pro de los ideales socialistas”. Por esos trabajos, por esos esfuerzos debemos ser lo que tenemos que ser, socialistas, y continuar la lucha por el ideal socialista, por un mundo sin injusticia como dice nuestro himno. Y, en mi opinión, si alguien no piensa esto y antepone otras cosas como intereses personales, personalismos u otros ideales, puede ser joven socialista de carnet, pero no de corazón.

Hoy casi 100 años después de su muerte, el trabajo y el esfuerzo de Tomás sigue a delante con el esfuerzos de muchos jóvenes que no nos resignamos a bajar el puño y no dejamos de aportar nuestro granito de arena a cada oportunidad pro de los ideales socialistas.

Somos los hijos del socialismo,

somos la fuerza del porvenir,

frente al capitalismo,

debemos luchar, vencer o morir.

 

Luchamos por la noble causa,

de la revolución social.

Debemos combatir sin pausa,

para que triunfe la igualdad

 

Injusticias, privilegios,

que hacen al hombre sufrir.

Ya se acaban, ya se acaban,

¡los vamos a suprimir, a suprimir!

 

Es la lucha final que empezamos,

por el triunfo de la revolución

Si es preciso que sangre vertamos,

será por nuestra emancipación.

 

Injusticias, privilegios,

que hacen al hombre sufrir.

Ya se acaban, ya se acaban,

¡Los vamos a suprimir, a suprimir!

 

Injusticias, privilegios,

que hacen al hombre sufrir.

Ya se acaban, ya se acaban,

¡Los vamos a suprimir, a suprimir!

¡Adelante socialistas!