Después de asistir a la primera convención política provincial del PSPV-PSOE de Castellón he creído necesario hacer la siguiente reflexión.
Tras todas las intervenciones y mesas de trabajo desarrolladas hemos podido constatar con argumentos y cifras la mala gestión del gobierno del PP. Que tanto a nivel de Generalitat, como a nivel de Diputación y de ayuntamientos es nefasta a falta de calificaciones mayores…
Hemos podido ver que existen maneras de reducir el efecto de esta grave crisis producido por este capitalismo sin control. Sin que ello suponga un aumento general de impuestos, sino a través una redirección de los fondos públicos actuales. A lo que demos sumar el cambio de modelo hacia empresas públicas frente de las privadas, más caro. Hasta el punto de que como sociedad no nos podemos permitir en pagar en sobre todo en Sanidad y Educación, de donde dependen nuestras vidas y el futuro.
Es por ello que el PP no puede seguir gobernando, ya que su política está basada en el caciquismo, el amiguismo o la siempre arbitrariedad. En resumen, corrupción que daña el interés general de nuestra sociedad.
Dicho esto, los socialistas no pueden conformarse con los vicios del esta derecha matona y corrupta. Instalados en una pasividad que permite que los gobiernos del PP se asignen como propios los éxitos y avanzas de políticas desarrolladas por los gobiernos socialistas, o infraestructuras impulsadas por los planes de recuperación más recientemente.
Este PSOE abrazó a la tercera vía debe recomponerse, volviendo a la base del socialismo democrático, demostrarse digno heredero de la historia, que tiene ante sus pies un camino digno y fuerte para llevarnos a todos a un lugar mejor.
Como dijo un sabio una vez lo importante no son las personas que representas las ideas, sino la idea. Ya que lo cambia señoras y señores, no son las ideas, son las personas.
Por ello, me gustaría recordar ciertas partes del Manifiesto Fundacional del PSOE:
Considerando que esta sociedad es injusta, porque divide a sus miembros en dos clases desiguales y antagónicas: una, la burguesía, que, poseyendo los instrumentos de trabajo, es la clase dominante; otra, el proletariado, que, no poseyendo más que su fuerza vital, es la clase dominada. Que la sujeción económica del proletariado es la causa primera de la esclavitud en todas sus formas: la miseria social, el envilecimiento intelectual y la dependencia política. Que los privilegios de la burguesía están garantizados por el Poder Político, del cual se vale para dominar al proletariado. Considerando que la necesidad, la razón y la justicia, exigen que la desigualdad y el antagonismo entre una y otra clase desaparezcan, reformando o destruyendo el estado social (…)
El Partido Socialista tiene por aspiración:
Primero. – La posesión del poder político por la clase trabajadora.
En suma, el ideal del Partido Socialista es la completa emancipación de la clase trabajadora. Es decir, su conversión en trabajadores libres e iguales, honrados e inteligentes