El pasado Miércoles en Hoy por Hoy de Radio Castellón (audio) pudimos escuchar como el Portavoz del Consell de l’Estudiantat defendía la politización por parte de los partidos políticos de las asociaciones de vecinos como único medio para conseguir  repercusión o sus fines, hecho el cual critique y califique de inadmisible e intolerable como Secretario de Universidad del Consejo de la Juventud de Castellón (entrada), a raíz de lo cual se me ha tachado desde mentiroso y manipulador a persecución de fines políticos, usando como única escusa mi pertenencia a diversas organizaciones y asociaciones, con el único de fin de tapar unas declaraciones cuanto menos afortunadas, en una actuación que ya hemos visto en el pasado por parte de algunos miembros de la derecha que basan su defensa en la calumnia, la manipulación y estrategia de acoso y derribo sin respetar el ámbito privado alguno.

Mi pasada critica, pese a lo que digan algunos, no va con fines de ninguna parte pues aunque  algunos han usado mi afiliación política y asociativa como único argumento para atacar y tumbar mi critica además de acusarme de mentir, sin decir donde exactamente solo que miento, más fácil imposible, yo en ningún momento he hecho referencia a partido o asociación alguna en mi crítica, como se puede comprobar en la anterior entrada, aunque haya razones de peso más que sobra para criticar a algunas organizaciones. La crítica no tiene más el fin de destacar lo alarmante que es que la figura de representación del Consell de l’Estudiantat defendiera que el único medio de las asociaciones (aunque fuera de vecinos) para tener repercusión y conseguir los fines es la instrumentalización de esta por los partidos. Y hago constar que es esta instrumentalización de los partidos políticos, aunque hay que sumar muchas más cosas, como principal causa del descenso de la participación y el asociacionismo que se ha producido en las últimas décadas.

El papel de las asociaciones en la sociedad ya sea bien en general o en su ámbito de actuación en especial, tienen una labor de representación de un grupo o colectivo, su papel en la sociedad es reclamar y exigir el cumplimiento de las políticas aprobadas, su rectificación si van en contra del interés del sector al que representan, y la instauración de nuevas políticas encaminadas ya no solo a mejorar la situación del sector al que representan , sino medidas a fomentar la participación y el asociacionismo, para incrementar el capital social, lo que supondrá una mejora tanto del entorno como de la sociedad. Por eso defiendo y defenderé la independencia de las asociaciones y su libre actuación, y la participación libre de cualquier persona milite donde milite siempre que persiga los mismos fines y aya se encargara el partido político que le interese de respaldar o no las peticiones de una asociación, pero de ninguna manera aceptare ni ahora ni nunca, y menos si es mi propio partido quien lo hace (ya que alguno vendrá diciendo que solo critico a los otros) la utilización de las asociaciones como meros instrumentos o marionetas.